El comienzo

Hace ya unos dos años, me picó la curiosidad, cada vez con mayor frecuencia tenía en mente una historia, no era como un sueño de esos, que al día siguiente no te acuerdas, esto era algo distinto. Como decía, finalmente me picó la curiosidad, ¿qué era esa historia? ¿y quién era el protagonista que cada vez con mayor frecuencia asaltaba mi mente?

Recuerdo muy bien aquel día, el día en que todo empezó. En la ciudad en la que vivo, la playa está a pocos kilómetros, por lo que darle al zapato, es una opción a tener en cuenta. Iba con mi familia, y cuando ya nos volvíamos caminando, sin motivo alguno, permanecí todo el trayecto callado y pensativo, sentía como si tuviera algo en la cabeza que quería sacar para ver que era.

Pulsé el botón de encendido de mi ordenador nada más llegamos a casa, y abrí un Word donde escribir, elegí este método porque así es como estudio siempre. "Voy a hacerme un esquema" pensaba. Yo creía que lo que tenía en mi mente sería algo para una viñeta de un chiste, o para una hoja de cómic, en todo caso, era seguro que no ocuparía más de tres hojas. Pero la sorpresa me llegó en ese momento: ¡Había terminado y llevaba cuarenta folios escritos!, pero lo que mas me llamó la atención no fue eso, había terminado en efecto, pero terminado de empezar. Apenas había empezado de plasmar algo de grandes dimensiones...

Espero que les haya gustado el relato de esta semana, ¡Nos vemos el próximo sábado!, hasta pronto.

Joan Escriva Pellicer